miércoles, 11 de abril de 2012

Un taxista muy particular


La reunión se prolongo hasta altas horas de la noche, pasándoseme un poco las copas y tuve que dejar mi automóvil en el estacionamiento de la empresa y pedir un taxi.

Cada fin de año nuestra empresa realiza una celebración en el salón de conferencias, con la finalidad de que podamos compartir con nuestros compañeros, ya que muchos no nos vemos porque realizamos actividades distintas. La reunión se prolongo hasta altas horas de la noche, pasándoseme un poco las copas y tuve que dejar mi automóvil en el estacionamiento de la empresa y pedir un taxi.

Cuando me avisaron me despedí de algunos colegas que estaban conmigo, incluso uno, Aníbal me acompaño y ayudo a subirme al móvil. Mi compañero le indico al taxista donde debía dejarme y el hombre encendió el motor y emprendió su recorrido. Yo un poco atontado me tire en el asiento. Me quede dormido no sé cuanto tiempo solo recuerdo que desperté cuando alguien me toma del hombro y me dice bájate. Mire y vi un hombre de no más de 25 años, enseguida recordé que debía ser el taxista que me avisaba que ya habíamos llegado a nuestro destino. Trate de despejarme un poco y baje un poco atolondrado por el trago, en definitiva el dormir hizo mas estragos en mi.

Al bajarme desconocí donde estabamos y le dije al chofer, que donde estabamos que no recocía ese lugar, enseguida él me toma de un brazo e hizo que me arrodillara y me dijo: ¡¡¡Ahora borracho de mierda, vas a chupármela!!! No entendí nada, e intente decirle que pasaba y él saco su verga erecta y la puso en mi boca. Medio mareado y todo mi olfato despertó y olí su herramienta con olor a macho en celo y sin mediar palabra me la introduje en la boca y él comenzó culiarme la boca, provocando que me dieran arcadas, entonces le dije que lo hiciera despacio o ahí terminaba todo. Entendió mi pedido y lo empezó a hacer mas lento. Su verga no era muy grande y algo delgada. Me culio la boca por un par de minutos y luego acelero un poco mas jadeando fuertemente, lo que me indico que estaba pronto a acabar. Y no me equivocaba porque casi enseguida retiro su falo de mi boca y se pajeó sobre mi cara lanzando su primera carga sobre mi pelo y el resto en mi cara y algunas gotas en mi boca, las cuales retire con mi lengua y las trague.

El se retiro de mí y abrió la puerta del automóvil y casi enseguida me paso un poco de toalla de papel para que me limpiara la cara. Luego me levanto y me dijo que deseaba devolverme la mano chupándome la mía, pero le dije que el alcohol me había inhibido la excitación. Entonces él me dijo no te creo y me sentó en el asiento del pasajero con las piernas fuera del auto y procedió a bajarme el cierre del pantalón y sacó mi pene semi erecto hacia afuera, y de dije ¿vez?.

¡¡¡Mi verga no quiere despertar!!! ¡¡¡ No tiene muchas ganas!!!.

Pero sin pensarlo dos veces, me miró y abriendo la boca se metió mi pene y empezó a darme una mamada increíble, sentí como poco a poco gracias al vacío que provocaba en su boca mi pene se iba erectando cada vez mas y más hasta tomar su tamaño y grosor que me enorgullece(21 y cabezón), y me lo mamo por espacio de unos 5 minutos.

 Luego me recostó en el asiento y siguió mamándome la verga mientras me bajaba un poco más los pantalones al mismo tiempo no pude evitar meter mi mano por debajo de su pantalón logrando introducir mi mano en su culo hasta llegar a tocar su velludo agujero, eso le gustó mas aún tanto que empezó a mamarme con mas placer aún, cuando ya tuve mi pene completamente duro por la excitación que él me había provocado, sacó su boca y me pidió que hiciera lo mismo con él. 

Enseguida le dije que me ayudara a desvestirme y después él también se desnuda completamente y me dijo que bajáramos del automóvil y abriendo el maletero saco una especie de frazada la cual estiro sobre la hierba y se acostó esperando que yo me acercara. A esas alturas el mareo ya se me estaba pasando, solo sentía el que me provocaba oler su cuerpo. Tome su pene y me lo introduje entero en la boca, sentía que la tenia hasta mi garganta, y lo disfrutaba, tomé también sus huevos y los lamí lentamente hasta metérmelos ambos en la boca, y él se estira y agarro mi verga y nos trenzamos en un 69 fabuloso. Casi enseguida mi mano le agarré el culo e intente meterle un dedo, que lo hizo estremecerse; a su vez Ricardo según me dijo después, también tuvo la misma intención e introdujo su mano en mi culo y empezó a dilatarme con los dedos mi agujero. Cuando dejé de chupárselo, él también lo hizo y me miró y se dio vuelta acercando su culo blanco y velludo hacia mi pene, si más que decir, le metí poco a poco mi pene en su culo, al comienzo fue difícil por el grosor que mi pene tiene, pero poco a poco su culo fue aceptándolo y el dolor que en un comienzo sintió se transformo en placer, tanto que el mismo se movía de adentro hacia afuera logrando que mi pene entrara y saliera de manera consecutiva. Era increíble lo que estaba sucediendo allí, en esos parajes, para mi desconocidos pero, eso no importaba solo que tenia a un hermoso ejemplar sentado en mi verga cabalgando, que se daba placer y me lo proporcionaba a mí.

Continuo cabalgando por un par de minutos más y cuando ya casi sentía que me venía di un suspiro enorme y retiré mi pene de su culo y le tire sobre la frazada lanzando parte de mi semen en su pecho porque él se levanta y atrapo con su boca el resto de leche y lo engulló junto con mi pene aun erecto y caliente, lo lamía aun con mas placer, seguramente porque sabía que ese pene había estado en contacto con él segundos antes y sentiría el propio sabor de sus jugos anales, el hecho es que al poco tiempo él también eyaculó mientras me lo chupaba. Luego, después de eso, nos incorporamos, y nos vestimos y después de fumarnos un cigarrillo y contarme que se llamaba Ricardo y que era casado y lo típico que no era feliz, reanudamos el camino casi sin hablar. Esta vez me fui sentado delante al lado de él, solo le admiraba era precioso, ya el efecto del alcohol había pasado, seguramente lo había eliminado por la transpiración que me había provocado el tener sexo con Ricardo.

Cuando llegamos a mi casa me beso y me dijo que no le debía nada solamente que si me volvía a ver nuevamente él me haría suyo esta vez y tomando mi mano la acerco a su bragueta, notando que su verga estaba nuevamente erecta. Luego agarro la mía que estaba en las mismas condiciones. Le dije que debía bajarme ya que mis vecinas son un poco curiosas y no quería dar motivo ese día para ellas se entretuvieran.
Me baje y él me dijo que me acercara, y me dijo gracias mijito, estuviste genial, espero verte nuevamente, así lo espero también yo le dije. Se marcho y entre en mi casa y me tire en la cama y me quede pensando, que buena forma de despedir el año.

Si les gusto mi relato les invito a escribirme a:

Autor: gustavofigueroa
gustavofigueroa ( arroba ) hotmail.com


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